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viernes, 1 de julio de 2016

LA COMUNICACIÓN EN LA FAMILIA

por:
María Inmaculada Tejada Duarte
María Agripina Gabriel

La relación de la familia, requiere de un ambiente de seguridad y confianza para fortalecer los lazos emocionales y psicológicos que se desarrollan entre sus miembros. Este espacio se convierte en un medio natural para que sus integrantes descubran habilidades, formas para ayudarse y complementarse, satisfaciendo muchas de sus necesidades, especialmente las más profundas y complejas como las emocionales y afectivas.
Investigaciones realizadas por especialistas en la materia, indican que la familia es el principal espacio donde se desarrolla el ser humano.
Garantizar la vida: alimentación, protección e higiene. Desarrollan la seguridad básica y los vínculos emocionales de afecto y cariño entre sus integrantes.
Transmiten la cultura, ideas y costumbres; además de las normas de comportamiento aceptables en el grupo familiar y en la sociedad.
Por estas razones es tan importante mantener una adecuada comunicación entre los y las integrantes de la familia.
Si los miembros de una familia aprenden a comunicarse de una manera adecuada, que puedan identificar sus sentimientos y hablarse con la intención de construir una relación positiva y sólida, han dado uno de los pasos más importantes para sus vidas. Comunicándonos adecuadamente todos nos sentiremos: escuchados, queridos, apoyados, tomados en cuenta y con posibilidades reales de ser mejores personas.
Es importante aprender a comunicarse con efectividad en la familia. Para eso se requiere: tomar en cuenta las diferencias individuales, adecuar las formas de comunicación de acuerdo a las personas, circunstancias, edades, emplear el lenguaje adecuado para comunicarse con los hijos e hijas en las diferentes etapas de desarrollo, tener conciencia de los errores y fallas que pueden afectar negativamente el proceso.


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