sábado, 26 de mayo de 2012

Una madre no se cansa de esperar



Una madre sabe amar, cuidar, pero sobre todo sabe esperar. Ser madre mas que un privilegio, es un don que como todo regalo implica compromiso y entrega.   Los procesos propios de los hijos y los cambios que estos sufren, en ocasiones traen a la vida de las madres alegrías, sorpresas y dolor.
Acompañar a los hijos en la construcción de sus planes futuros, diseñar junto a ellos cuales serán las estrategias que desarrollarán para el logro de estos, son parte del proceso de espera de las madres.
Una madre nunca se cansa de esperar que sus hijos le dediquen tiempo  de calidad que valoren los esfuerzos que ella hace por mantenerse en pie sobre todo el esfuerzo de seguir viviendo.
Y pese a los DDD desencantos, desilusiones y desdicha que sus hijos les dan, ellas siempre cree que esos cambios que esperan de ellos llegarán tiempo.
Nueve meses para la llegada del bebé, doce meses para ver cómo dan sus primeros pasos, ocho años para ver como inicia su educación secundaria y doce años de estudio, para que entre a la universidad  a iniciar la vida universitaria las madres siempre de pie, siempre esperando que las cosas que desean para sus hijos lleguen.
El latir de una madre, solo es comparable con el de otra que esperó el resucitar de un hijo que fue mancillado, crucificado y negado por todos, excepto por ella que tenía la seguridad de que el volvería.
Madre es sinónimo de espera y esta es una espera no desesperada por que se hace con amor.
Las madres deben comprender que los hijos y los resultados  de la vida de estos no siempre estarán en   consonancia con los esfuerzos que ellas hacen para que logren sus metas.


Frase para reflexionar....

La gloria, la felicidad y el éxito es para los vencedores; para los que saben que Dios va delante peleando sus batallas por ellos; para los que no temen caer porque saben que su fe los levantara!!!!