Familias con hijos adolescentes

Por.

  Lorenza Rosario Montero lorenzarosario2009@hotmail.com                                                            María Victoria Figuereo viki.figuereo@hotmail.com 

La familia es lo más importante y embellecedor del mundo, por lo que podemos considerarla como flores que embellecen el jardín y que según la cantidad de pétalos que van creciendo corresponde a una flor, que dependiendo del cuidado y protección que le demos tendremos flores preciosas bien formadas para que sigan embelleciendo el jardín, pero que a través del tiempo esos pétalos van creciendo y produciendo cambios, lo que implica ser tratado de modo diferente. Pues así mismo sucede en el sistema familiar con los hijos adolescentes que van produciendo cambios dentro de cada sub – sistema específicamente cuando los hijos llegan a esta etapa.

Estos cambios que se van produciendo son significativos, ya que la familia debe reorganizar la forma de interrelacionarse y de actuar, por lo que, esto le permite a la familia una nueva adaptación, ya que surgen diferentes competencias, con frecuencias pueden surgir diferencias entre los padres y el adolescente, pues el adolescente quiere ser autónomo, crea propias expectativas, cambia su forma de actuar y pensar, pero deben ser respetadas.

Los padres deben aprender a ser sus amigos, escucharlos, saber cuáles son sus intereses y siempre demostrarles que ellos pueden, brindándoles la oportunidad de crecer o desarrollarse tanto en lo personal como en lo interpersonal, también deben orientarlos y guiarlos para que aprendan a tomar decisiones fructíferas en su vida. Además estas decisiones les servirán a los sub – sistemas mantener un buen vinculo  de relación interpersonal entre todos los miembros, los padres muchas veces, quieren seguir ejerciendo su autonomía, violando sus derechos, sobre protegiéndolo e impidiéndoles adquirir su propio desarrollo.

A veces los adolescentes muestran algunas conductas de rebeldía y desacuerdo con los padres porque sienten que les han violentado su privacidad, producto de la falta de confianza y respeto que muchas veces le manifiesta. Pero aunque la familia se encuentra en ese trance o crisis, hay que admitir que cada miembro del sub – sistema puede tener opiniones diferentes y debe aceptarlas, ya que esto fortalecerá un lazo, permitiéndoles compartir dentro de su sistema familiar.

La compenetración entre los sub – sistema familiar debe basarse en el amor y respeto, si estos dos valores están presentes en el seno familiar, aprenderán a convivir armónicamente. También les permitirá a los adolescentes mantener durante su desarrollo personal una buena relación interpersonal con los demás.